0 visitas
Quería iniciarme en el mundo del modelaje y para ello, contraté a un fotógrafo y posé para él en casa. Acabé en el sofá poniendo diferentes posturas, pero de repente noté como el chico me miraba el culo y los muslos con cara de salido. Cuando terminó decidí acercarme a él y noté su polla dura, así que le ofrecí pagarle por su trabajo con sexo y acabé abierta de piernas gozando con su enorme verga de color.