0 visitas
Durante un instante, dejé a solas a mis dos amigas rusas, mientras yo iba a por un refrigerio. Pero cuando volví las pillé besándose y metiéndose mano en la cama, una imagen que me puso muy cachondo. Empecé a tocarme y cuando me vieron, quisieron que me uniese a la fiesta. Las dos me la chuparon y finalmente, quisieron que me las follase a ambas en un trío salvaje que acabó con las dos pidiéndome leche.